Bioingeniería para regenerar la piel

Publicado en la revista digital "Muy interesante"

La estética y el cuidado de nuestra imagen exterior se ha convertido, para gran parte de la sociedad, en casi una obsesión. Así lo demuestran la ingente cantidad de cremas, protectores, limpiadores, etcétera que se venden cada día en farmacias y supermercados. Ahora, gracias a la bioingeniería de tejidos una investigación está desarrollando nuevos métodos de regeneración de la piel para enfermedades cutáneas como el síndrome de Netherton. ¿Quieres saber cómo?
En la piel existen un tipo de células que renuevan periódicamente de forma natural la capa epidérmica de nuestro cuerpo: las células madre epidérmicas. Como si de una serpiente se tratara pero menos exagerado y más constante. Gracias a la utilización de este tipo de células, un grupo investigador de distintos ámbitos y centros están desarrollando un método para conseguir crear piel compatible y sana.
De hecho desde hace años se trabaja en esta dirección para conseguir que las enfermedades cutáneas tengan una cura más barata, fiable y menos destructiva. Como explica la investigadora del departamento de Bioingeniería de la Universidad Carlos III de Madrid, Marcela del Río, "hemos encontrado que ese potencial regenerativo [el de las células madre epidérmicas] puede ser preservado in vitro si dichas células se ensamblan y pasan a formar parte de una piel generada empleando técnicas de bioingeniería de tejidos".
Así pues, con un pequeño trozo de piel de un paciente, gracias a este tipo de técnicas, se puede generar prácticamente toda la superficie cutánea de la persona. De hecho, este avance no solo podría funcionar como "parches" de piel sana, sino que como indica del Río, su capacidad regenerativa "abre la posibilidad de emplearlas como diana de protocolos más complejos aún, como es la terapia génica".
Síndrome de Netherton
Actualmente se están llevando a cabo estudios preclínicos sobre enfermedades como el síndrome de Netherton (una extraña enfermedad genética de la piel que provoca la muerte entre el 10 y el 15 por ciento de los neonatos que la sufren). Se espera que a medio plazo se trasladen a la práctica los avances llevados a cabo en esta investigación.
El grupo de investigación está compuesto por científicos del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) y del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Raras (Ciberer) perteneciente al Instituto de Salud Carlos III.