Y yo se lo advertí...

Mi amiga "X". No le pongamos nombre. Marido guapete, con ganas de vivir, negocio propio al que había que empujar, trabajar, en fin, lo que siempre hay que hacer con un negocio. Arréglate, ponte guapa, ni caso. El caso es que "X" no es fea. Es alta, tiene unos grandes ojos verdes a los que no saca ningún partido (jamás se maquilla), pero no se cuida en absoluto. Le sobran treinta kilos, pero ése no es el problema principal. El atractivo no está únicamente es ser gorda o flaca, sino que, en este caso concreto, el problema estaba en aquel preciso momento en la negatividad de "X". Nada de vacaciones, hay que ahorrar. Ni un capricho, ni salir, ni vivir. Sólo trabajar. La vida es puro sacrificio. No sé de dónde sacan algunas personas, buenas personas por otra parte, esa capacidad para valorar el sufrimiento en clave positiva. El don del sufrimiento, la obligación del sufrimiento, el valor cuantificable, honorable y digno de adoración del sufrimiento.

¡Demonios, ya sabemos que a veces hay que cargar con el sufrimiento! Pero no te hagas su colega, no le invites a diario. El sacrificio hay que llevarlo con alegría y dejarlo a un lado siempre que sea posible. ¡Hay que vivir! Vivir es lo más importante, amiga "X". Se trabaja para poder disfrutar, no para encasillarse en el esfuerzo y en la negación del festín que la vida ofrece como contraprestación a quienes luchan. No es sólo cuestión de dinero, es sobre todo cuestión de alegría. Ni caso. "X" no me hizo nunca ni caso hasta que sucedió: él se fue con otra. Divorcio, nueva boda y..."X" no le olvida, no puede olvidarle y se venga de él trabajando. Dividieron el negocio y ella cree que su venganza debe consistir en "salir adelante" y demostrarle que ella es capaz de ....trabajar, como si él no lo supiera. Amiga "X"¡Sal de ahí dentro! Arréglate, ponte guapa, búscate amigos, vive. Te estás vengando en ti misma. ¡Deja de engordar, por lo que más quieras, tu salud se terminará por resentir seriamente! ¡Deja de odiarte y castigarte porque él se fue! ¡Cuida tu exterior, pero sobre todo, mima tu interior, quiérete! No hay forma. No me hace el menor caso. Hay muchas formas de suicidio, negarse a vivir es una de ellas.

Damablanca.

Mi amigo "Y". No le pongamos nombre. Es un señor común. Ni alto ni bajo, ni gordo ni flaco. La señora "X" diría que es un hombre gris. Tiene un trabajo mínimo, rutinario. Nunca hizo una tarea distinta. Está conforme. Se jacta de tener un solo par de zapatos y responde a quien se sorprenda, si ha visto a alguien que calce dos pares a la vez.
El señor "Y" tiene una esposa normal y dos hijos normales. A veces sus ojos se van detrás de unas piernas interminables. Entonces la señora "Y" lo reprende burlona y él - colorado como un tomate - se ríe. Los dos ríen...
Todos los meses guarda en una vieja lata de galletas una parte del sueldo para las vacaciones. - Las vacaciones son sagradas, repite al que le pregunta.
El señor "Y" ha dejado atrás el sufrimiento y el sacrificio - además de la culpa, del karma y otros venenos -. Está convencido que el dolor es inherente al ser humano y lo acepta como parte de su proceso de consciencia, pero el sufrimiento, no. Es otra invención del ego.
El señor "Y" tiene muchos momento felices. Ha decidido no tener expectativas, él hace su tarea y deja que el Universo las ponga. De chico - en las obligadas clases de catecismo, antes de la Primera Comunión - había aprendido que ni las flores ni las aves se preocupan por su alimento. Ellas confian plenamente en la Naturaleza. El señor "Y" había decidido imitarlas.
Sabe - mi amigo - que cada persona debe representar el papel que - en libre albedrío - eligió antes de encarnar. No desea cambiar a nadie. Ni siquiera se plantea cambiar él. Es más, y debo reconocer que mi amigo es muy especial, insiste en que no hay hechos buenos ni malos. Que ambos son igualmente necesarios para la evolución.

Pero si de algo estoy seguro, es que mientras la señora "X" destruye su estómago y su vida, por la rabia y el rencor. El señor "Y" estará disfrutando de una humilde y perfecta tortilla de patatas. En paz.

PD: Gracias a Emilio Carrillo y Enric Corbera, por señalarme un camino.

Veo que has leído a Emilio Carrillo. A mí me lo han recomendado, dicen que resultan muy interesantes las cosas que plantea, pero aún no he leído nada suyo.

¡Hasta pronto!

Damablanca.

Hola Damablanca: Leer a Emilio es un placer. Pero escucharlo es todavía mejor.

Lo último - referido a su libro "DIOS" - es un aprendizaje total en apenas cuatro horitas...

En el primer video, la charla comienza en el minuto 17:40.









LA CAJA DE PANDORA

Gracias por tus aportaciones anahuel. Muy interesante.

Un abrazo,

Damablanca.