Fallece Sandro

Fallece cantante Sandro tras lucha de 45 días por operación; tenía 64 años

En las últimas horas fue sometido a dos intervenciones quirúrgicas por
complicaciones derivadas de un trasplante cardiopulmonar. Un cuadro de infección generalizada finalmente acabó con su vida.

Buenos Aires. El cantante argentino Roberto Sánchez, más conocido como
Sandro, murió hoy lunes a los 64 años en un hospital de Mendoza, donde el 20 de noviembre había sido sometido a un trasplante de pulmón y corazón, informó una
fuente médica.

"Sandro falleció como consecuencia de un cuadro de shock séptico a las 20:40 horas locales", dijo el médico Claudio Burgos a los periodistas que aguardaban noticias, junto a decenas de seguidoras del artista que habían comenzado a reunirse frente al hospital Italiano.

La salud del cantante se agravó hoy lunes tras ser sometido entre la madrugada y la
tarde de este lunes a dos intervenciones quirúrgicas por complicaciones derivadas del trasplante.

Tras las cirugías, los médicos lanzaron un pedido público para conseguir 40 donantes de sangre para el paciente. Sin embargo, un cuadro de infección generalizada finalmente acabó con su vida.

Hasta el domingo la salud del popular cantante parecía evolucionar favorablemente.

"No vemos una gran mejoría, pero lo hemos estabilizado", había dicho Perrone al dar cuenta de que El Gitano había logrado respirar por sus propios medios por breves períodos en un proceso lento que buscaba superar la respiración asistida y que quedó por el momento en suspenso.

Perrone admitió que el paciente "ha tenido muchos inconvenientes por las fístulas bronquiales y la infección y eso ha retrasado bastante la recuperación" y agregó que el artista tiene altibajos en su estado de ánimo.

Roberto Sánchez, Sandro, víctima de una larga enfermedad producto de su adicción al tabaco, estuvo durante largo tiempo esperando órganos compatibles para el trasplante y finalmente el 20 de noviembre pasado recibió el corazón y los pulmones de un donante de 22 años.

Voceros de la familia indicaron que será Olga Garaventa, la esposa de Sandro, quien
decida dónde y cómo será velado en Buenos Aires.

Del rock a la música romántica

De origen humilde, el artista revolucionó el mundo del rock con el grupo Sandro y
los de fuego a comienzos de los 60, cuando se atreve a cantar en español a clásicos anglosajones como The Beatles, Elvis, Paul Anka y los Rolling Stones.

Finalmente, se define por la música romántica y, con temas como Rosa, Rosa o Quiero llenarme de ti, seduce desde el escenario a millares de mujeres que hasta le arrojan su ropa interior entre gritos histéricos, en respuesta a los sensuales movimientos pélvicos del artista.

Sus temas trascienden
fronteras y comienzan a ser escuchados en Venezuela, Colombia, Perú, Uruguay, Paraguay, Ecuador, México, Puerto Rico, Costa Rica y República Dominicana.

Llegan también al mercado latinoamericano de Estados Unidos, donde en Nueva York recibe en 1969 un disco de oro por haber sido el artista latinoamericano con
más discos vendidos y en 1993 el premio ACE de Oro de la Asociación de Cronistas del Espectáculo.

Realizó numerosas telenovelas y 16 películas, entre ellas dos junto a la famosa
cantante Carmen Sevilla, lo que le abrió las puertas de España.

En Francia fue premiado en el Festival Internacional de Cantantes Galos y en Italia participó del Festival de San Remo.

El reconocimiento logrado en el extranjero llegó también en los últimos años de la mano de grandes artistas, como el baladista dominicano Dhario Primero, el guatemalteco Ricardo Arjona y el venezolano José Luis Rodríguez.

El Puma, por ejemplo, celebró sus 40 años en la música grabando un disco homenaje titulado Gitano con sus temas más reconocidos.

Descanse en paz.

Lo lamento muchísimo.

Damablanca.

Gracias Ety por iniciar este tema, el artículo que publicaste lo dice todo, la enfermedad, el transplante a que fue sometido, las esperanzas que todos tuvimos de que evolucione bien y le den el alta, y el desenlace que nadie quería oir. Yo no fui una seguidora de su carrera, pero es inevitable no conocerlo, es parte de nuestro país y de Latinoamérica, significa mi adolescencia, crecer con sus canciones, sus películas. Yo era "fanática" en aquellas primeras épocas de Sandro de otro gran ídolo popular que a veces nombramos, Palito Ortega y era como siempre pasa, se usaba "dividir" las aguas y parecía como que no se podía ser admiradora de los dos, había que ser "de uno u otro"...pero los años pasaron y llegaron otros artistas y uno comprende que no es necesario ser tan absoluto, nunca lo ví en vivo ni compré sus discos pero conozco casi todas sus canciones, al menos las más clásicas. Lo concreto es que Sandro hizo una carrera exitosa, su público es incondicional, mujeres y hombres. Y algo muy particular que les cuento para poner un toque de alegría a este día tan triste, es que Sandro cumple años el 19 de agosto y las seguidoras se iban a la puerta de su casa a saludarlo, en la localidad de Banfield, en la zona sur del Gran Buenos Aires, a cantarle el "Feliz cumpleaños" a llevarle flores, regalos, etc. Y él implementó estos últimos años un sistema organizado en donde hacía pasar de a una a las chicas a una sala especial detrás de la puerta de acceso, allí se sacaba una foto, luego le tomaban los datos y les hacía llegar a su casa esa fotografía a cada una, o sea actitudes de un grande, yo no conozco otro caso así, y eso él decía que lo hacía por agradecimiento a esa actitud del público. Otra cosa que siempre comentaba es que él llevaba puesta siempre una pulsera de oro macizo, y decía que la había hecho juntando todo lo que le regalaba la gente, cadenitas, pulseritas, medallas, etc y la llevaba siempre consigo porque era el tributo de su público. En fin, que se fue un grande, todo el mundo tiene palabras emocionadas para él. Que descanse en Paz...

Se fue un hombre de barrio: “Yo no compro lo que vendo”

Comenzó como un remedo criollo de Elvis Presley y triunfó como baladista. El
misterio que lo rodeó fue fundamental para convertirse en leyend






Esta es la historia de un hombre que quería ser cantante de rock and roll y se tuvo que conformar con ser mito. Es también una historia que se resiste a ser fábula: aquí no hay moraleja, apenas misterio.

Estamos hablando de una de las invenciones más minuciosas e intrigantes del espectáculo argentino. Él decía que Roberto Sánchez inventó a Sandro. A esta altura, habrá que sospechar firmemente que Roberto Sánchez era Sandro y que finalmente ésta fue la historia de un hombre que se inventó a sí mismo.

Como todos saben, antes de ser “de América” Sandro fue de Valentín Alsina.

El dato no resulta menor para la construcción eficaz de la leyenda: como Gardel o Maradona, su origen humilde y suburbano lo proveyó de una sabiduría extraña: con el marco inasible de su carisma y su risotada imbatibles, Sandro solía decir mentiras perfectas que sonaban a verdades absolutas. Como los chicos, sabía jugar los juegos con la seriedad que corresponde. Conocía sus límites y los límites del artificio.

Todas estas características no son otras que las que definen a un artista. Sandro era un artista que además cantaba.

Se consagró cuando sacudió la pelvis en Sábados Circulares de Mancera.

Venía de frecuentar la bohemia de La Cueva, el sótano donde Lito Nebbia, Miguel Abuelo, Tanguito, Moris, Javier Martínez y otros fundaron el rock argentino. Con el primer dinero se compró una Moto Guzzi modelo 46 que estacionaba en el cordón de los conventillos de Alsina. Su padre, Vicente, trabajaba en el frigorífico Wilson. Su
madre, Nina, leía historias árabes en el palier.

Él seguía parando en el Bar Pancho, pero ya esporádicamente. Cada vez tenía más shows, fama y dinero. Por entonces comenzó a acuñar frases y sentencias que repetiría por décadas con el énfasis de quien las dice por primera vez: “De mi casa para afuera soy Sandro; de mi casa para adentro, Roberto Sánchez: yo no compro lo que vendo”.

“¿Mi secreto? No tengo: simplemente uso jeans como si fuera un smoking y smoking como si fuera jean”.

“Mi única obsesión es no dar lástima en el escenario”.

Después de cantar en el Madison Square Garden de Nueva York, el 11 de abril de 1970, en uno de los primeros eventos musicales televisados en vivo a buena parte de América, el éxito desfondó cualquier previsión.

El fenómeno de Los Beatles había cambiado drásticamente los modales en
relación entre fan y artista: corrían tiempos de fiebre enfervorizada, amor y locura.

Sandro comenzó a filmar películas populares -que no buscaban otra cosa que cabalgar sobre el suceso musical y afirmarlo-, y a mantener una sorda competencia con otros exitosos cantantes de la época, como Palito Ortega y Leonardo Favio, en la conquista de América. Todavía no era el mito indiscutible. Era, sí, el ídolo de una buena porción de los jóvenes.

Para los que gustaban del rock nacional o, por ejemplo, de cantantes de los llamados “testimoniales”, como Joan Manuel Serrat, Sandro era un cantante “complaciente” que basaba todo en su imagen.

Cuando empezó a dejar de ser el remedo criollo de Elvis Presley para -por el paso del tiempo o por simple intuición artística- ir vislumbrándose como el crooner que era, Sandro observó cómo el furor menguaba.

Ya había dejado de ser un fenómeno discográfico, ya su búnker de Banfield se había convertido en el hogar blindado que lo aislaba de las desmesuras del fervor pop y, al mismo tiempo, en una usina de rumores desopilantes. Si a principios de los '70 tuvo que desmentir supuestos contactos “con la guerrilla”, tiempo más tarde le endilgaron hijos (“a partir de hoy parece que tengo exactamente 5 hijos”, ironizó en 1977),
variadas inclinaciones sexuales, enfermedades y un variopinto desfile de mujeres por su cama.

Lo concreto es que la vida íntima parecía bastante más discreta que las fantasías alimentadas desde diferentes fuentes: la ocupaban simplemente algunos amores (Julia Viscani, Tita Rouss, quizá María Marta Serra Lima, después María Elena Fresta) y el cuidado de su madre Nina. Sus vicios continuaban intactos o más bien en franco ascenso: la bebida (en este orden: champagne, whisky, gin) y una cantidad de tabaco que durante dos décadas rondó los 80 cigarrillos diarios.

“Nadie maltrató tanto su cuerpo como yo”, dijo alguna vez entre el arrepentimiento y la vanagloria. La historia de Sandro era, también, espejo de los valores de cierta clase media barrial. A pesar de que en él se hacían carne muchos de los contrastes y contradicciones de la argentinidad, el prototipo no llegó a degenerar en caricatura.

Sandro, el ídolo, Roberto Sánchez, había nacido en la Maternidad Sardá a las 3.20 del 19 de agosto de 1945.

Mariano del Mazo

Sus vicios continuaban intactos o más bien en franco ascenso: la bebida (en este orden: champagne, whisky, gin) y una cantidad de tabaco que durante dos décadas rondó los 80 cigarrillos diarios

Interesante artículo, Ety, creo que en una carilla resume bien el periodista la vida y la carrera de Sandro. Y éste párrafo que rescato parece ser que lamentablemente fue lo que lo llevó a la muerte, que pena que tantos ídolos populares terminen tan mal a causa de sus excesos. Estos últimos días se han dado en nuestra televisión cantidad de programas homenajeando a Sandro, algunos recitales, películas y también notas periodísticas que él ha ofrecido a los medios. Y viéndolos ahora desde otra óptica creí descubrir a un hombre un poco distinto al que veía antes, será que por ahí uno no daba la dimensión a las palabras, como que no se llevaba muy bien con la fama, aquello de vivir detrás de un gran paredón para preservar su vida privada, nunca asistía a fiestas del ambiente, jamás a un estreno, dicen que muy pocas personas ingresaron a su casa, eso no estaría mal si él resguardaba su intimidad, pero lo escuchaba separar tanto a Roberto Sánchez de Sandro y tal vez estaba peleado con el artista, no sé lo noté como un hombre triste, extraño. De todas formas ya no está y lo que sintió se lo llevó como su secreto. Ya es mito y leyenda, este fin de semana fue de evocación, me daba tristeza verlo cantando o en sus películas...

Marta, curiosamente a mi me pasa algo similar. Ahora que Sandro murió y he tenido la oportunidad de leer algo más sobre él también me di cuenta que se trataba de una persona muy valiosa. Tenía buena voz, pero sus canciones no me convencían, por lo que lo escuchaba muy poco. Y sobre sus características personales yo no sabía nada.

Que pena que después de muerto se den a conocer las cualidades de un hombre que tenía muchas cosas más que compartir.

Ety

Hola, me uno a esta conversación y Marta, te pregunto a tí que estás allí en Bs.As. qué sabés de Leonardo Favio, qué es de su vida?
Es de la misma época de Sandro, sé que estaba enfermo, pero no mucho más y ¡cómo disfruté de sus canciones cuando era jovencita!..."yo corté una flor..... y llovía llovía", preciosas.
Es una persona muy talentosa, en cine fue director, guionista, actor.
Inevitablemente cuando falleció Sandro, recordé enseguida a Favio, siendo diferentes y personalmente me gustaba más Favio.
Bueno, saludos si sabés algo contame.

Que pena que después de muerto se den a conocer las cualidades de un hombre que tenía muchas cosas más que compartir.

Te comento, Ety, que en Argentina hubo en vida de Sandro mucha gente que supo de él, quizás fronteras afuera ahora trasciendan sus palabras, su obra, pero tanto el público incondicional que lo esperaba luego de sus períodos prolongados de silencio y llenaba los teatros, o el periodismo que siempre se ocupó de su carrera y de su vida privada con el respeto que él imponía. De ahí que hay tanto material grabado de espectáculos, reportajes y las películas de los '70 que esas sí no adquieren más dimensión ahora de muerto, eran y son lo que son, aquellas historias simples en que los cantantes actuaban y cantaban, pero que fueron suceso entre las fanáticas. Lo que sí me llamó la atención del artículo que publicaste es que se nombran las bebidad que según el autor de la nota tomaba Sandro, porque se supo que el tabaco le había arruinado los pulmones, pero respecto a otros excesos, siempre se mantuvo el misterio en torno a muchos períodos de internaciones que tuvo Sandro en una Clínica de Lanús, cercana a Banfield en donde vivía, y la excusa cuando trascendía al periodismo de chimentos eran "chequeos"...

Rosario me pregunta por Leonardo Favio, lo último que recuerdo saber de él fue cuando el año pasado se estrenó "Aniceto" una belleza de película -dirigida por Favio- en donde el protagonista es un eximio bailarín clásico -Hernán Piquín- que fue muy premiada. Y en ese momento cuando aparecía en notas se lo veía muy frágil de salud, no se mueve con facilidad, lo operaron de las caderas y anda con bastón, ahora que lo menciona Rosario asociado a Sandro pienso que es raro que no lo hayan llamado de ningún medio, porque hablaron todos los conocidos, artistas, periodistas, etc y seguramente él hubiera tenido mucho para decir, tal vez no ande bien de salud. Tenía para cantar un estilo muy personal y marcó toda una época con sus canciones. Si sé algo más te comento, Rosario. Un cariño a tod@s.

Gracias Marta, por atender mi pregunta.
El tiempo pasa, no pensaba que tuviera esa edad, lo creía sesentón

Rosario escribió:Gracias Marta, por atender mi pregunta.
El tiempo pasa, no pensaba que tuviera esa edad, lo creía sesentón

Rosario, es un placer como siempre intercambiar ideas y si podemos aportar algo, mejor que mejor , pero no creo que lo de Favio sea cuestión de edad, puede que tenga la edad de Sandro -64- o un par más pero no mucho, se inició muy jovencito en el cine y tiene una carrera extensa, que cuando vos recordás agregó el canto y con éxito pero la salud y los "achaques" no perdonan y no tienen edad. Yo hasta me puse a reflexionar a raíz de tu pregunta y lo que yo decía sobre testimonios de todos los que conocieron a Sandro que tal vez algún medio (radio o Tv) lo haya localizado a Favio para hablar y él no haya querido, es un hombre muy sensible y tal vez (esto lo pienso, no lo tengo confirmado) pero conociendo su perfil de hombre tan nostálgico y frágil de salud no haya tenido fortaleza para hablar de la muerte de Sandro. A Palito Ortega lo han llamado y habló de lo que yo comentaba, la "rivalidad" que inventaban entre ellos y en realidad fueron grandes amigos y colegas y compartían grandes momentos, incuso contó Palito que las oficinas de sus representantes en aquellos años de grandes triunfos quedaban en un mismo edificio y se encontraban constantemente y se reían de esa rivalidad que intentaban imponerles. Cariños a tod@s.

Marta, si no me equivoco Palito Ortega se metió a la política.

Ety

Marta sabés que me fijé en la wilkipedia y tiene 71 años Leonardo Favio, además para mi sorpresa su nombre también es otro.
Ety, sí creo que hasta fue diputado o senador y hubo un escándalo en ese tiempo referido a coimas en el que se encontró envuelto no sé si será verdad, lo recuerdo a Palito sentado en el sillón del programa de Susana Giménez, y hasta lloró por ese tema.
No fue feliz esa incursión en la política.

Es difícil meterse en política y salir indemne...

Damablanca.

Es verdad, la política deja marcas, y me parece que la gente que no tiene que ver con el tema no debería "meterse" a hacer política. Difícilmente quedan iguales a como eran antes...Como bien uds recuerdan, uno de los casos en Argentina fue Palito Ortega, él tenía una carrera intachable, te podía gustar o no como canta, como actúa, como compone, pero jamás nadie había puesto en dudas su honestidad, un hombre que venía de un origen humilde en tu provincia, Tucumán y había ascendido por triunfos en su carrera a una posición económica muy acomodada, una vida familiar "de película" casado con una mujer de cara angelical que conoce en filmando una película, se casan, ella deja todo para dedicarse a su marido y sus hijos -tuvieron 6-...en el medio un descalabro económico que se le produce a Palito como empresario porque trajo al país a Frank Sinatra, un logro porque nadie había podido hacerlo, pero uno de los movimientos del dólar que nunca faltan, literalmente lo arruinaron...Se va a vivir a Miami para volver a cantar y recuperarse...Hasta que un día le proponen, lo tientan para postularse a Gobernador de su provincia...y gana las elecciones, hace una gestión con altos y bajos, en el medio su esposa, que colaboraba con él en temas sociales se ve mezclada en denuncias de malversación de fondos, vienen las desmentidas, las pruebas pero como decimos las sospechas y las dudas rondan...Y más adelante es Senador Nacional y ahí es cuando recuerda Rosario que se lo vio en el programa de Susana llorando emocionado porque se pusieron a recordar toda su vida, y la parte política incluída. El tema de las "coimas" visto desde los que denuncian, dirán que si las recibieron, y desde el Senado lo niegan...El asunto es que no le resulta fácil a Palito reinsertarse en el mundo del espectáculo, digo en Argentina, él hace giras por distintos países con éxito pero no se arriesgó todavía a hacer un concierto en Buenos Aires, y eso que está de moda la nostalgia y él tiene sus seguidoras que lo recuerdan. Yo pienso que tal vez le de temor al fracaso...

Y sí Rosario, el nombre de Favio es "artístico" él es de origen sirio me parece, apellido Jury...Saludos a tod@s.

Pues entonces Leonardo Favio debe ser pariente de nuestra Estelita Juri, y según ella me ha dicho, el apellído es de origen turco.

Cuando aparezca Estelita por el foro nos lo va a aclarar.

Ety

Claro, Ety, es probable porque nació en Mendoza.
Encontré este video en Youtube, :

Precioso enlace, Rosario.

Abrazos,
Damablanca.

Rosario, me devolviste a mi "juventud"

Ety

De verdad que sí, Rosario, un hallazgo el video que publicaste. Que artista tan personal es Leonardo Favio, recuerdo muy bien sus primeras épocas como cantante y era raro, insólito pensar el éxito que logró, digo en el buen sentido porque rompió los moldes con su manera de cantar, los tonos de voz, las canciones, su personalidad tan cautivante, y las chicas "morían" por él. Y recuerdan cuando hacía dúo con "Carolita" que era su esposa en aquellos años. "Din, don, din, don son las cosas del amor"...que buenos recuerdos...