¿Qué hacemos en este mundo?

Imagino que muchos de los que pasan por aquí de vez en cuando se habrán hecho, como yo, como todos, la misma pregunta alguna vez: ¿Cuál es la razón por la que estamos en este mundo?

La religión nos enseñó que esta vida es un camino hacia la otra.

La filosofía oriental nos cuenta que estamos aquí para aprender y para compensar acciones marcadas en nuestro karma por vidas anteriores.

Los agnósticos nos hablan del azar, de que todo sucede como una enorme casualidad dentro del caos cósmico y que no hay razón para hacerse semejante pregunta.

Ahora bien, ahondando en lo que nos enseñan, en lo que nos leemos o incluso en lo que sentimos ¿no es cierto que nos gustaría encontrar una respuesta certera o aproximada sobre cuál es la razón, si la hay, para que estemos en este mundo?

Me parece que hablar del caos, del "por que sí", es un poquito como simplificar las cosas o no intentar penetrar en las verdades más profundas que, posiblemente, no estén a nuestro alcance o no del todo. La mente humana es estrecha, racional en sus límites. Nos ha costado miles y miles de años llegar hasta donde hemos llegado, entender cómo funciona la electricidad, saber cómo atacan las bacterias, comprender lo que somos y cómo funciona nuestro organismo desde el punto de vista físico. Caminamos despacio, paso a paso. Cierto, hemos llegado a la luna y aún más allá...en un fragmento ínfimo de lo que es el universo. Somos pequeños, insignificantes si nos comparamos con todo lo existente, pero también individuales, irrepetibles y cada uno de nosotros alberga en su interior un pequeño universo en el que la materia se concentra y funciona con las mismas reglas existentes en toda la Creación.

Tampoco se puede simplificar el concepto de "Dios" como algo inventado por el hombre para trascenderse a sí mismo o como "alguien" que inventa reglas para que las sigamos al milímetro. El humano siempre ha imaginado a Dios en la medida de lo ininteligible, pero captando sus efectos. Al principio se adoraba al sol, luego a la fuerza misteriosa del destino, luego...luego...Siempre parece existir "algo" que está por encima de lo que nosotros somos capaces de alcanzar o descubrir. El "gran misterio".

Dentro lo lo supuestamente caótico del universo y sus innumerables esferas, fenómenos etc. a mí, desde mi pequeñez, se me ocurre atisbar un orden y un por qué, puesto que existen unas "normas" que parecen afectar a todos y a todos. La vida, por ejemplo, siempre tiende hacia la vida, aún dentro del "reciclaje" que supone la muerte. Vemos cómo la vida se cuela en cualquier rendija, entre algo tan inanimado como el cemento, enseguida que surge un resquicio nace una brizna de hierba, y la muerte hace otro tanto: cuando algo "falla" surge la enfermedad que si la dejas que continúe termina matando, pero no con afán destructivo, sino como vía de renovación, porque en lo creado nada se destruye, todo se recicla. La vida es una fuerza imparable y somos hijos de esa fuerza. Ahora nos queda entender por qué y para qué y ése es el gran misterio al que cada cual debe enfrentarse, porque estoy segura de que cada uno de nosotros lleva consigo la respuesta y es cuestión de buscarla.

Estamos aquí por algo y para algo. Me cuesta trabajo creer que somos simplemente fruto del azar, no como individuos, sino ya como especie. Todo tiene que tener una razón. A lo mejor nuestros propios condicionamientos personales, nuestras dotaciones y nuestras circunstancias pueden ayudarnos a descubrir cuál es nuestro camino.

Perdón por toda esta parafernalia mental, expuesta en una maravillosa mañana de verano en la que apetece tomar el sol y escuchar el canto de los pájaros. Ahora mismos los oigo desde la ventana que tengo junto al ordenador.

Damablanca.

Muy buena pregunta, Dama, miré tu post antes de irme a Villa Feliz, y me fuí pensando en tu planteamiento.

Hoy, despues de descansar del ajetreo, empiezo mi semana. Segurita que por la tarde podré sentarme a platicar acerca de tu pregunta.

Un abrazote de inicio de semana, y pa'lante, ea...!!!



Negrita linda.