Platero y Yo

¿Quién no cabalgó sobre Platero durante la infancia e incluso la adolescencia?

Cientos de burros recorren Moguer para celebrar el aniversario de Juan Ramón

La expedición ha convivido con la lectura de varios poemas del Nobel

Las principales calles de la localidad onubense de Moguer se han visto hoy "invadidas" por burros de distintos tamaños y edades, montados por niños del pueblo vestidos de Papa Noel, la forma que tiene este municipio de celebrar el aniversario del nacimiento de Juan Ramón Jiménez.

Subidos a lomos de burros que recuerdan al principal personaje de su libro "Platero y yo", uno de los que le sirvió para obtener el Nobel de Literatura en 1956,
los moguereños celebran así cada año el aniversario de su vecino más ilustre, en lo que se denomina la 'Gran Burrada Navideña', que ha partido a las 17:00 horas desde la Casa-Museo, donde se conservan los fondos del poeta y gran parte de su historia.

Tras dar lectura a algunos poemas del Nobel, la expedición, encabezada por una carroza, ha partido hacia el centro de la ciudad.

Esta original cabalgata fue una iniciativa, que comenzó hace ya unos años, del moguereño Manuel Raposo, pero es ahora la asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Moguer la que se encarga de su organización, de su proyección y de su mantenimiento.

Conmemoración

La comitiva tiene como eje la propia Casa-Museo, que el próximo domingo 26 de diciembre hará tres años que fue reabierta tras una completa restauración.

Se trata de un edificio del siglo XVIII que fue restaurada en profundidad para recuperar todo el edificio de los importantes problemas que tenía como consecuencia del paso del tiempo, y que en 2004 fue declarada por la Junta de Andalucía Bien de Interés Cultural.

La familia de Juan Ramón Jiménez se trasladó a la vivienda en 1883 cuando el poeta tenía dos años, y en ella vivió hasta los veinte años, cuando murió su padre.

Buena parte de su producción literaria se centra en este ámbito familiar, según escribe el propio poeta: "es la que llenó de experiencia que luego serían entes y sombras de mi niñez y mi primera juventud".

La vivienda fue convertida en Casa-Museo en el año 1956, y en su creación colaboró directamente la mujer del poeta, Zenobia Campruví.